Huesca y los coches
Tras dos años de intensa investigación en la que han sido importantísimos aquellos días de lluvias extremas, granizadas tamaño bolo y temperaturas polares, he llegado a la conclusión de:
en Huesca la gente es tan vaga que tiene garage y aparca el coche en la calle por no abrir la puerta
punto.
En el momento en que el tiempo se pone jodido, puedes aparcar sin problemas en la mismísima calle Zaragoza a horas punta. Impresionante. Y eso sólo ocurre los días en que los isocarros corren peligro, o el peinado puede estropearse, o los pingüinos circulan con abrigo.
Claro que hay otras posibles razones para no usar el garage:
Propiciar las relaciones sociales: "Holaaa, como he visto el coche abajo, mi'dicho debe estar en casa voy hacer una visita.
Promocionar la persona: " Miraaa, ese es el coche nuevo de fulano"
Promover la psicomotricidad: Momento en que observas que para aparcar bien, te falta justo el espacio que el de delante ha dejado en sobreabundancia. La frase del momento se ha obviado para no herir nuestras muy finas sensibilidades.
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karlos -